El Colegio Nuestra Señora se apresta a celebrar sus Bodas de Oro. Toda la comunidad se siente hermanada en los sentimientos que este aniversario despierta en sus corazones. Alumnos, docentes, padres, colaboradores, de ayer y de hoy son convocados para recordar, revivir, emocionarse, celebrar y sobre todo agradecer lo que esta institución brindó a los jóvenes en estos cincuenta años.
La Comisión de Prensa y Difusión integrada por Claudia Francioni, Estela Tantone, Zulma Sabetta y Marta Abil, adelantó detalles de la organización del gran acontecimiento y repasó aspectos de la historia de la institución educativa que es orgullo de Ascensión durante la siguiente entrevista:
“La mayoría de la gente, sobre todo los mayores, conocen los orígenes del colegio, pero no vendría mal retroceder 50 años atrás para hacer un poco de historia, ya sea para los jóvenes o quienes no la conocen”.
“Para poder realmente entender lo que significó el surgimiento de esta institución educativa, hay que situarse en esa época, mediados de los años 50 donde solo contábamos con una escuela primaria en el pueblo, que era la Escuela Nº 3. Eran poquísimos los jóvenes que podían continuar los estudios secundarios ya fuese por escasez de recursos para trasladarse a centros universitarios (Junín, Colón o Lincoln) o el esfuerzo que eso demandaba a las familias y ni que hablar del desarraigo”.
“El Padre Paris Etulain, el cura párroco, captó la necesidad de una escuela secundaria para el pueblo, que posibilitara a los jóvenes a completar sus estudios para después poder seguir una carrera universitaria o terciaria en otro lugar”.
“El Padre Paris era linqueño y de ahí conocía a la Congregación de las Siervas María de Anglet quienes se hicieron cargo de la dirección del colegio. Estas religiosas no solo se dedicaron a educar, sino también fueron celadoras, cocineras, enfermeras, mucamas, asesoras espirituales y administradoras del colegio. Ellas fueron Amelia Sabatte (Ma Mere-Madre Superiora), Hermana Lucía y Hermana Elvira”.
-Cuando puede decirse que fue el inicio de la obra?
“En el año 1955 el Sr. Enrique Pastorino y su esposa Leonor Brianza de Pastorino donan el terreno y en 1958 colocada la piedra fundamental para comenzar la construcción del edificio. Podría decirse que tras un arduo trabajo mancomunado, ese proyecto se ve concretado, con su inauguración en febrero de 1961”. Con el curso secundario (magisterio) y en mayo de ese año se incorporó jardín de infantes y la primaria al año siguiente.
-Como se logró solventar la construcción?
“Fue un trabajo de la comunidad que entendió como una solución a sus problemas de desarraigo de sus hijos, falta de medios para trasladarse a otros centros de estudio. Todo el mundo colaboró para completar y mejorar la construcción inicial que fue bastante precaria pero contaba con la infraestructura básica para que pudiesen dictarse las clases”.
“Durante 20 años, una Comisión de Caballeros, denominada “Pro Edificio”, constituida por 18 integrantes fijos, actuó constantemente organizando rifas, almuerzos, las recordadas y tradicionales kermeses”.
“Las colectas por “bolsa de cereal” fueron múltiples, las vaquillonas donadas por los productores destinadas a los asados que congregaban familias enteras, se conseguía el aporte del vino, soda, pan para los asados.
También estaba la Comisión de Damas que preparaba tortas, postres, empanadas, pasteles que luego se vendía en distritos kioscos y rifas.
Con los ingresos de estos eventos se iban sumando paredes, ventanas, mejoras, así que sin el aporte de todo el pueblo esta obra no hubiese sido posible”.
-Cuantos jóvenes egresaron en la primera promoción?
“La primera promoción de maestros egresó en 1965, fueron 17, entre los cuales hubo 2 varones. Ese año se contaba con un total de 350 alumnos, 60 de las cuales era alumnas pupilas, permaneciendo en el colegio toda la semana al cuidado de las religiosas”. El título era Maestra Normal Nacional.
En el 78 se brindó educación terciaria, en la que se formaron gran cantidad de docentes cuyas carreras hicieron en el mismo colegio”.
“En el año 1994 la congregación cesa en sus funciones educativas y el colegio pasa a manos del Obispado de San Nicolás”.