Después de 25 años de labor y profunda vocación de servicio,
Margarita tiene el privilegio de formar parte de la primera promoción de enfermeras del Partido de General Arenales que se graduaron tras cumplir una exigente formación en el Hospital Municipal durante dos años, para luego comenzar a ejercer su profesión durante 25 años en la sala de primeros auxilios de Ascensión.
En dialogo con este medio, la querida enfermera, expresó: “eternamente agradecida a Dios y a la familia que tengo porque si no me hubiese apoyado no podría haber hecho el curso y ejercer mi profesión, ya que todos trabajaban pero gracias a ellos y a Dios pude realizarlo”.
Asimismo confesó: “nunca pensé en ser enfermera porque desconocía todo, lo aprendí en dos años de estudio entre los años 86 y 87 con destacados médicos y profesores”.
Al referirse a sus primeros pasos remarco “me temblaban hasta los cordones de los zapatos pero tuve la suerte de empezar a trabajar con el Dr. Adolfo Scevola, un maestro que nunca me retaba sino que me enseñaba a hacer las cosas. Después tuve un gran apoyo del Dr. Miguel Coloma, una persona excelente y me enseño mucho, ya que hacía las curaciones explicando como se debía a hacer y siempre estaba a mi lado para enseñarme”.
Sobre sus compañeros de trabajo, dijo “pasaron muchísimas chicas, cuando entré a trabajar estaba Teresa Ehagaraz y Elida Becacesse, con quienes aprendí mucho. Después me siguió Elsa Castro y Miriam Peralta y así sucesivamente fueron llegando otras. Siempre hubo un buen manejo entre nosotras y siempre traté de no mezclar la amistad con el trabajo para poder cumplir mejor con nuestra función”.
Desde aquellos años a esta parte,
No teníamos médico de guardia y la atención en principio era de 8 a 12 y de 16 a 20 hs. y al medico había que llamarlo en el momento de la urgencia. Después empezaron a quedarse algunos médicos, no había la tecnología, los insumos y los avances de ahora. Todo era muy precario, había que hervir las agujas y los elementos que usaba el médico para esterilizarlos, ahora es todo descartable”.
“Actualmente es una pequeña clínica, ya que todos los días está el médico de guardia y el chofer de la ambulancia, incluso los fines de semana, la atención está completamente cubierta y eso le brinda una tranquilidad muy grande a la gente porque ante cualquier emergencia saben que va a llegar pronto la respuesta”, indicó Margarita.
Por ultimo expresó: “muchas gracias a todos porque a veces en este trabajo se recibe algún mal gesto o contestación rara, pero hay mucha gente agradecida, especialmente aquellos que menos tienen.
Y es muy gratificante que la gente te agradezca por hacer lo que es mi obligación, pero igualmente expresan un agradecimiento que es algo muy lindo para todos los que trabajamos al servicio de los demás”.