El delantero volvió a ser figura en la victoria ante Doce de Octubre, dedicando sus goles a la familia en un día especial
Federico Eizaguirre se convirtió nuevamente en el héroe de Singlar al anotar un doblete decisivo en la victoria frente a Doce de Octubre, resultado que permite al equipo mantenerse sólido en la primera posición de la tabla de posiciones.
Un arranque prometedor que encontró continuidad
El goleador reconoció que había comenzado bien la temporada en términos individuales, aunque atravesó un período de 3-4 partidos sin convertir. «Es normal porque la liga está muy dura, todos los partidos son muy parejos», explicó Eizaguirre en la zona mixta tras el encuentro.
La actuación del «9» no se limitó únicamente a los goles. Durante los 90 minutos demostró un trabajo integral, desdoblandose en más de una oportunidad y siendo eficaz tanto en el área rival como en la presión defensiva. «Singlar es eso: correr, meter, intentar jugar bien, pero más que nada dejar todo con la camiseta», resumió el delantero sobre la filosofía del equipo.
Un clásico que no defrauda
El encuentro ante Doce de Octubre tenía todos los condimentos de un partido especial. Ambos equipos han protagonizado finales memorables en los últimos torneos, con triunfos repartidos que han alimentado una rivalidad sana pero intensa.
«Era un partido picante. Se nota de afuera y también de adentro que se recuerdan las finales», admitió Eizaguirre, quien reconoció no haber estado presente en esos encuentros decisivos pero percibió la tensión especial del duelo.
El delantero destacó la fortaleza del rival: «Ellos tienen un equipo duro, atrás son fuertes y también tienen grandes jugadores arriba, se han reforzado bien». Sin embargo, confía en las virtudes propias: «Nosotros tenemos lo nuestro, muchos jugadores de club y con poco refuerzo, creo que vamos bien».
Goles con dedicatoria especial
El primer tanto llegó tras una jugada de fuerza en el área. «Con el pecho, era chocar y meterla, porque estaba ahí cerca del arco», describió con sencillez el atacante sobre la acción que abrió el marcador.
Pero los goles de esta jornada tuvieron un condimento emotivo particular. Eizaguirre aprovechó la oportunidad para dedicar sus conquistas: «Para mi familia, que siempre viene a ver, para mi novia que cumple años, así que fue un lindo regalo de cumpleaños, y también para mi viejo, mi vieja, mi tío que vinieron hoy. La familia es importante».
Liderazgo consolidado
Con esta victoria, Singlar se mantiene en lo más alto de la tabla con una ventaja de cuatro puntos sobre el segundo clasificado. «Seguimos con una mínima ventaja, así que contento porque da tranquilidad», concluyó Eizaguirre, consciente de que cada punto suma en una liga que él mismo define como «muy pareja».
El doblete del delantero no solo significó tres puntos vitales para las aspiraciones de Singlar, sino que también reafirmó su rol protagónico en un equipo que sueña con el título y cuenta con la garra y determinación de jugadores comprometidos con la camiseta.