El refugio canino municipal, bajo la dirección de Daniel Rossi, ha lanzado una innovadora iniciativa para mejorar la calidad de vida de los perros rescatados del abandono: el proyecto de padrinazgo. Este programa permite a las personas contribuir al bienestar de los animales sin necesidad de llevarlos a casa.
El padrinazgo brinda la posibilidad de cubrir las necesidades de los perros del refugio, promoviendo su crecimiento saludable y proporcionando un entorno de afecto similar al que recibirían al ser adoptados. De este modo, aquellos que no pueden hacerse cargo de un animal en su hogar pueden aún así mejorar la vida de estos perros.
Una de las claves del éxito del programa es la interacción social. Los padrinos pueden visitar frecuentemente a sus ahijados caninos, brindándoles atención y cariño. Esta relación no solo beneficia a los perros, sino que también ofrece una experiencia gratificante para los padrinos.
Desde la implementación del proyecto, se han registrado cuatro padrinazgos y tres adopciones exitosas en menos de 60 días. Estos resultados, sumados a las adopciones desde principios de año, ya superan las cifras de 2023. La difusión en redes sociales ha sido fundamental para concientizar sobre la esterilización y adopción de animales, ayudando a reducir la población canina en la comunidad.
Próximamente, el refugio colaborará con la localidad de Arribeños para promover las imágenes de los animales en busca de padrinos o familias definitivas. Esta expansión del proyecto busca continuar el impacto positivo en la vida de los perros rescatados y fomentar la responsabilidad en la tenencia de mascotas.
El proyecto de padrinazgo canino no solo mejora la vida de los perros, sino que también fortalece el vínculo entre la comunidad y los animales, creando un efecto dominó de buenas acciones.