A pesar de la jornada destemplada y con amenaza de lluvia permanente, la final del torneo local convocó a una multitud, donde los hinchas de ambos clubes protagonizaron un espectáculo aparte, aportando euforia y colorido, con un comportamiento muy positivo ya que no hubo ningún tipo de incidentes a pesar de las precauciones tomadas por la Policía Comunal que dispuso de un amplio operativo con más de 25 efectivos a cargo del Subcomisario Pablo Barile y con la supervisión del Comisario Inspector José Nicanor Espinosa.
Los simpatizantes llegaron desde hora temprana para ver la primera final de División Reserva y no pararon de alentar durante toda la jornada, viviendo ambos partidos con mucha intensidad sin ningún inconveniente. Incluso la desconcentración fue muy prolija y todo se desarrolló con absoluta normalidad en un ejemplo de lo debe ser siempre una justa deportiva.