Asistieron a la a cargo del Rvdo. P. Salatiel DJ (Discípulo de Jesús)Guadalupe Andrada, Rita Almirón, Kevin Andrada, Álvaro González y Javier Castillo.
Cuando recibimos la invitación, fue un si rotundo, pero era toda una intriga, a donde vamos? Con quienes nos encontraremos? Que decimos?. Llego el día de partir. El viernes 26 de octubre del comienza la misión la cual fuimos convocados por nuestros hermanos de Garín. Nos pareció que los días de preparación fueron pocos, pero nuestra predisposición y docilidad de llevar a Jesús donde él nos mande nos allanó el camino. Preparamos rosarios y para la puesta en común de los temas, una obra de teatro guiada por el hermano Fidel, pero sobre todo lo más importante preparamos nuestros corazones con misas, con oraciones y confesándonos con el padre Guadalupe.
Las armas para la misión habían sido preparadas, las indicaciones dadas y el grupo se predispuso a partir de las manos de Jesús para transmitir el amor del señor. Llegando al lugar nos invadió el temor de no ubicarnos, aunque sabíamos que muchos en nuestro pueblo rezaban por nosotros, el grupo puso el GPS de oración en marcha y nos allano el camino a la parroquia Jesús Misericordioso.
Al llegar recibimos la bienvenida y compartimos una misa y TABOR (adoración al santísimo), recargamos nuestras pilas para dicha misión que comenzaría al otro día por la mañana bien temprano. Fue un día de hermosas experiencia vividas por todo el grupo en si que misionábamos en barrios muy precarios, con necesidades materiales y espirituales. Cada uno de nosotros recibíamos lecciones de vida que atesoraremos en nuestros corazones. Una de las conclusiones fue que más enseñábamos, mas aprendíamos del prójimo, la reciprocidad vivida por gracia de Jesucristo nos enseñaba que mas damos mas recibimos y que si rezamos unidos en comunidad permaneceremos unidos y fortalecidos por Cristo Jesús. Como gracias especial El Señor permitió que fuéramos testigo de algunos frutos de la misión, como personas que nos abrieron la puerta de su casa para que entre el amor del Señor, las encontramos al día siguiente en la misa y luego juntos compartimos un plato de alimentos. Como ejemplo tenemos muy presente a Carlos, un hombre esclavizado por los vicios que tras la misión empezó a ir a misa y desea salir de sus vicios y trabajar en la parroquia.
La alegría y el gozo fue mayor y el agradecimiento a Jesús sabiendo que muchos siembran y solo Dios sabe cuando cosecha. La partida fue entre abrazos, bendiciones y un nos vemos en la próxima misión. El viaje de regreso fue entre cantos, oraciones e inundados de una gran alegría la cual fue incrementada con el recibimiento en la misa de la capilla de Hogar.
Invitamos a todos los jóvenes de nuestra localidad que deseen integrarse para participar del grupo el día martes a las 19 horas.